miércoles, 11 de abril de 2012

PREHISTORIA

¿PREHISTORIA?

Mon y Raky son dos jovencitos, chico y chica. Van vestidos con pieles de animales y se calzan con botas del mismo material. Aunque el frío es intenso, hoy luce el sol. En la puerta del hogar, la cueva, se comunican. Demuestran un gran interés el uno por el otro. La chica Raky admira a Mon, le encuentra más delicado que al resto de los chicos y hombres del grupo.

En cambio el resto de los hombres le miran mal. Mon tiene un defecto en una pierna y no es apto para cazar corriendo entre los mamuts lanudos. Él está apesadumbrado. Tiene cierto sentido del ridículo. No se siente útil dentro del grupo. Como no puede hacer un ejercicio físico igual que sus compañeros, es retraído y le gusta mucho tallar la piedra y la madera.

En realidad con esta actividad se encuentra muy satisfecho. Su madre mueve la cabeza con  desánimo cuando le ve, piensa que su hijo no va a poder defenderse igual que los otros muchachos. Teme por su vida. Es moreno con el pelo duro y negro, la piel oscura, pero en cambio sus ojos son dulces, amables. Irradian una luz color caramelo.

 A Raky le encanta estar a su lado y ver como trabaja. Los cazadores le encargan puntas de fecha porque el filo que logra sacarlas es superior a las que manejan habitualmente, con lo que penetran mejor en la piel de los animales que cazan. Todo el clan vive de ella. Durante una muy larga temporada todo está cubierto de nieve y no pueden recolectar, ya que no sale ningún vegetal de la tierra.

A Mon también le gusta Raky la encuentra bonita, es de piel más blanca que la suya pero sus ojos negros relucen, a él le parece que incluso en la oscuridad. Además sabe estar callada, cuando se sienta a su lado en el suelo mirando como trabaja. Hace que se sienta importante.

Por eso en los ratos en que está solo está tallando una cosa distinta. Algo parecido a una figura humana, pequeña, a la que está vistiendo con algún material de deshecho que encuentra. En la cabeza le ha pintado con hollín algo que se asemeja al pelo de los humanos, y también en la cara ha dibujado ojos y boca. Esta con las comisuras hacia arriba en un gesto simpático.

 Esta tarde cuando Raky está con él le ha tocado con delicadeza la cara y le ha entregado su creación. Ella al ver lo que era se ha quedado callada, sin habla y con la boca ligeramente abierta. Luego le ha sonreído y cogiéndole las dos manos se las ha llevado a su cara. Después apretando con ternura contra su pecho la figurilla de sus ojos han brotado unas lágrimas de gratitud.

Fuencisla enero 2012  







3 comentarios:

  1. Tierno relato. ¡Vivan los artistas! Del defecto de la cojera surge una mente creadora. Preciosa la frase: Sus ojos...Irradian una luz color caramelo.
    Me ha gustado mucho. Se lee fácil, como el agua.

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  2. Fuencis, me gusta que lo hayas narrado en presente, pues a pesar de ser sobre La Prehistoria, le hace más cercano, más creible.

    Tornasol

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  3. Muchas gracias.
    Me alegro que os haya gustado.

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